Energía del presente mirando al futuro
El precio varía según el tipo de caldera, la potencia necesaria y la complejidad de la instalación. Ofrecemos presupuestos personalizados tras una evaluación técnica.
Normalmente, la instalación dura entre 4 y 8 horas, dependiendo de si es una sustitución o una instalación completamente nueva.
Sí, si tiene más de 15 años o no cumple con la normativa actual. Además, los nuevos modelos son más eficientes y reducen el consumo de gas.
Lo verificamos según la disponibilidad de la red de distribución en tu zona. Si no hay conexión cercana, evaluamos soluciones alternativas.
Depende del tipo de instalación y equipos a adaptar. Ofrecemos un estudio gratuito para determinar el coste exacto.
Sí, siempre que sea realizada por técnicos certificados y con los materiales adecuados.
Se debe desmontar y legalizar su retirada. Nos encargamos de la gestión completa, incluyendo la certificación de cierre.
Depende del tamaño y complejidad de la instalación. Te daremos un presupuesto tras evaluar el trabajo necesario.
Se recomienda una revisión anual. Además, las inspecciones oficiales son obligatorias cada 5 años.
Si notas olor a gas, llamas amarillas en los quemadores o un aumento inesperado en el consumo, es importante que un técnico revise la instalación.
Cierra la llave de paso, ventila la zona, no enciendas luces ni electrodomésticos y llama a un técnico autorizado de inmediato.
El precio varía según la potencia requerida y la estructura del tejado. Ofrecemos estudios personalizados para determinar el coste exacto.
Generalmente, entre 5 y 10 años, dependiendo del consumo de energía y las subvenciones disponibles.
Sí, aunque con menor eficiencia. Además, se puede instalar un sistema de baterías para almacenar la energía sobrante.
Es obligatorio para nuevas instalaciones, modificaciones importantes y en viviendas sin suministro activo.
Solo empresas instaladoras certificadas como la nuestra.
Depende del tipo de instalación. Ofrecemos precios competitivos y servicio rápido.
Para garantizar la seguridad, eficiencia y evitar averías que pueden ser costosas.
Sí, con revisiones periódicas y asistencia prioritaria en caso de avería.
Sí, con sistemas de monitorización que permiten ver el consumo en tiempo real y detectar fallos.
Depende del tipo de instalación y materiales, pero suele estar entre 100 y 300 euros.
Si la factura sube sin razón, hay humedad o el contador sigue girando con los grifos cerrados.
No, pero es recomendable en zonas con agua dura para evitar acumulación de cal.
Puede durar entre 20 y 50 años, dependiendo del material.
Entre 1,5 y 3 bares.
Revisar si hay fugas, verificar la válvula de presión y limpiar filtros.
Aislarlas con material térmico y dejar un pequeño flujo de agua corriendo en días de mucho frío.
Si son de plomo, tienen más de 30 años o presentan fugas frecuentes.
Entre 1.500 y 5.000 euros, dependiendo del tamaño de la vivienda.
El cobre es más duradero, pero el PVC es más económico y resistente a la corrosión.
El cobre es más duradero, pero el PVC es más económico y resistente a la corrosión.
Entre 50 y 150 euros.
Depende de la potencia contratada, generalmente entre 3,45 kW y 5,75 kW.
Si tiene más de 25 años o presenta problemas de seguridad.
Puede ser por conexiones sueltas, sobrecarga o fallos en la instalación.
Sí, es un requisito de seguridad en todas las instalaciones modernas.
Sí, cada 5 años en viviendas y cada 4 años en comunidades.
Olor fuerte, aumento en la factura, llamas amarillas en quemadores.
Entre 500 y 2.000 euros, dependiendo del tamaño y ubicación.
Cerrar la llave de paso, ventilar, no encender aparatos eléctricos y llamar a un técnico.
Depende de la disponibilidad de la red en tu zona.
Entre 4.000 y 12.000 euros.
Entre 25 y 30 años.
Sí, aunque con menor eficiencia.
Entre 5 y 10 años.
Sí, en muchos países se puede vender a la red eléctrica.
Entre 800 y 3.000 euros.
Anualmente.
Usar termostatos programables y aislar bien la vivienda.
Desde 300 hasta más de 2.000 euros.
Cada 3 meses.
Para nuevas instalaciones o aumentos de potencia.
Solo empresas certificadas.
Entre 1.500 y 5.000 euros.
De 3 a 7 días, dependiendo del proyecto.
Sí, si se hace con técnicos certificados.
Entre 300 y 1.000 euros.
Entre 50 y 200 euros.
Se debe corregir la anomalía antes de obtener el certificado.
Entre 200 y 800 euros.
Sí, para evitar riesgos de fugas
Entre 8 y 15 años, dependiendo del mantenimiento.
PEX, PVC, cobre y multicapa, según el uso.
Desde 50 hasta 500 euros, según la gravedad.
Instalando un descalcificador o filtros antical.
Dejar correr el agua y revisar el estado de las tuberías.
Entre 300 y 1.500 euros.
Al menos 4 en dormitorios y 6 en salones y cocinas.
Sí, es obligatorio para proteger contra cortocircuitos.
No conectar demasiados dispositivos a la misma toma.
Revisar si hay un cortocircuito y probar desconectando dispositivos.
Entre 100 y 500 euros.
Con vinagre y bicarbonato o desengrasantes especiales.
Inspección periódica y limpieza de quemadores.
Sí, pero se deben evaluar las condiciones de la vivienda.
Más de 30 años si se mantiene adecuadamente.
En algunos casos, una licencia municipal y permisos eléctricos.
Depende del consumo, pero entre 6 y 12 para una vivienda media.
Sí, pero debe acordarse con la comunidad de vecinos.
Una inclinación entre 30° y 40° es ideal.
Sí, para almacenar energía y usarla cuando no hay sol.
Depende del tamaño y consumo, pero las de condensación son más eficientes.
Entre 19°C y 21°C durante el día y 17°C por la noche.
Realizar mantenimiento periódico y usar termostatos programables.
Sí, en términos de consumo energético.
Al menos una vez al año, antes del invierno.
Unos 100 frigorías por metro cuadrado.
Mantenerlo a 24°C, cerrar puertas y ventanas y limpiar los filtros.
Desde 2.000 euros en adelante.
Sí, con equipos portátiles o split sin unidad exterior.
Depende del tamaño, pero los sistemas split son los más comunes.
Un documento que acredita que la instalación cumple con la normativa.
Entre 100 y 300 euros.
Sí, para nuevas instalaciones o cambios en la instalación existente.
Normalmente entre 24 y 72 horas.
No se puede dar de alta el suministro.
Desde 1.000 euros.
Sí, y suele ser más fácil que en una vivienda ya terminada.
Mediante tuberías externas o internas con ventilación adecuada.
De 2 a 4 semanas.
Sí, por seguridad.
Mayor seguridad, ahorro y suministro continuo.
Entre 1 y 2 días.
En algunos casos, solo los inyectores de los quemadores.
Desde 300 euros.
Consultando con la empresa distribuidora.
Cada 5 años en viviendas.
Con agua jabonosa en las conexiones o detectores de gas.
Boletín de instalación y contrato con la comercializadora.
No, pero es recomendable.
Un técnico autorizado.
Se debe anular la conexión y retirar las tuberías con seguridad.
Sí, por normativa de seguridad.
Entre 200 y 800 euros.
Solo técnicos certificados.
Llevarlos a un punto limpio o reciclarlos.